Estafas en línea difíciles de detectar
Gracias a la avanzada tecnología y al rápido desarrollo de Internet, la mayoría de los productos y servicios que necesitamos en nuestra vida cotidiana están disponibles en línea. Tanto si busca entretenimiento, como si quiere comprar, leer las noticias o incluso prestar dinero, el mundo online se lo ofrece.
Aunque Internet ha acercado mucho el mundo y nos ha permitido vivir mucho mejor, tiene algunos contras. El contra más popular al que se enfrenta la gente son las estafas en línea. En los últimos años, las estafas son muy frecuentes y los gobiernos tienen dificultades para controlarlas.
Protegerse contra estas estafas puede ser a veces muy difícil. Por eso hemos querido compartir las estafas online más comunes y aumentar su nivel de concienciación en lo que respecta a este problema. Vamos a comprobarlo.
Préstamos personales
Los prestamistas online se han hecho muy populares en los últimos años. Mucha gente ha empezado a preferirlos a los bancos porque sus tasas de aprobación son significativamente más altas, el tiempo de aprobación es menor y es fácil tratar con ellos. Por desgracia, los estafadores han aprovechado su impulso para robar a la gente su dinero.
Dado que se trata de una especie de institución financiera, se podría pensar que se está a salvo, lo que no es el caso en algunas ocasiones. Por suerte, hay algunas formas de detectar si el prestamista es falso o no. Si piden pagos por adelantado, o no hacen una determinada comprobación de crédito, lo más probable es que sean estafadores. Por lo tanto, es muy importante prestar atención a los detalles y estar al tanto de las empresas de estafa de préstamos personales.
Aunque parezcan fáciles de detectar, las estafas en los préstamos online tienen un porcentaje de éxito en las personas que no saben utilizar Internet. Asegúrate de investigar bien y abandona todo contacto si la empresa te parece un poco sospechosa. Más vale prevenir que curar.
Compras en línea
El segundo tipo de estafa en línea más común son los sitios de compras. A decir verdad, se trata de la estafa más fácil y aceptada porque el proceso de manipulación de los clientes es mucho más sencillo. Los estafadores crean sitios de compras donde la gente puede buscar sus productos favoritos. Después de pedir ciertas cosas en línea y esperar a que lleguen a su dirección, descubren que se trata de una estafa cuando los productos no llegan.
Si las ofertas son demasiado buenas para ser verdad, probablemente el sitio sea falso. Asegúrese de comprobar el nombre de dominio, navegue por su sitio, lea algunas reseñas y, sobre todo, compruebe su política de devoluciones. Estos pasos te darán una pista de si los estafadores están intentando atraparte.
Ahora bien, hay que tener en cuenta que hay sitios como Groupon, que ofrecen enormes descuentos y son de confianza. Al final, todo depende de ti; debes investigar la credibilidad del sitio antes de tomar cualquier decisión.
Phishing
Por último, tenemos el phishing. Este tipo de estafa suele realizarse a través de la suplantación de correos electrónicos, en la que se pide a la víctima potencial que deje información personal, como los datos de la tarjeta de crédito y las contraseñas, en sitios web falsos que se parecen a los legítimos. Por ejemplo, los estafadores recrean sitios como eBay o Amazon para que el usuario piense que está siendo contactado por un sitio de buena reputación. El phishing es muy difícil de controlar, por lo que debe prestar atención a los detalles y no confiar a nadie su información personal.
No se equivoque, las estafas en línea son un verdadero negocio. Recientemente, 80 personas fueron acusadas en Estados Unidos en la mayor estafa de este tipo en el país. Ten mucho cuidado con los datos que dejas en determinados sitios web.